Las distintas piezas de aluminio obtenidas por los diversos procesos de elaboración del metal, pueden sufrir una última transformación antes de someterse a la utilización final, aunque normalmente son las barras producidas mediante el proceso de extrusión las que requieren una última fase de acabado.
Los más extendidos son el anodizado y el lacado, con los que se consigue la coloración deseada de los distintos perfiles y piezas de aluminio.
El anodizado
El anodizado consiste en un reforzamiento de la capa de alúmina que de forma natural produce el aluminio en su proceso de oxidación. Para oxidar de forma acelerada las piezas de aluminio, se sumergen éstas en un baño electrolítico, haciendo dichas piezas la función de ánodos (de ahí el nombre de anodizado). La composición química del baño y el paso de la corriente eléctrica por el mismo produce la disociación del oxígeno del agua en la parte más próxima al ánodo, lo que permitirá su rápida oxidación, creándose una capa de alúmina (óxido de aluminio) de un espesor que estará en función del tiempo de duración del baño. El espesor habitual del anodizado suele oscilar entre 10 y 20 micras (milésimas de milímetros). la capa de alúmina así formada es my dura, transparente y porosa, por lo que resta finalizar el proceso con un sellado de dichos poros. Las piezas se sumergen en un baño de agua hirviendo durante un periodo de tiempo similar al del baño electrolítico lo que confiere a la alúmina nuevas propiedades como son una mayor dureza, compactación y de gran resistencia a los agentes atmosféricos. Por último, y para finalizar el proceso del sellado, es posible tintar las piezas con el color deseado, bastará únicamente introducir dichas piezas en un baño del color elegido el tiempo necesario para que las moléculas del color se introduzcan en los poros del óxido que se cerrarán posteriormente, quedando dichas moléculas aprisionadas definitivamente.
El lacado
El lacado de las piezas de aluminio no es otra cosa que la aplicación de pintura a las mismas. Con el fin de lograr una adherencia que impida su rápido deterioro, el secado de dicha pintura se realiza al horno. La gama de colores del aluminio puede ser tan amplia como la imaginación de los proyectistas, si bien, todos los fabricantes optan por ofrecer una gama limitada de colores que abarque la mayor parte de los deseos del usuario final.
Otros acabados
En los últimos tiempos y siempre tratando de ofrecer al usuario una mayor diversidad de productos, han aparecido acabados de imitación, que simulan otros materiales, como el acero inoxidable y la madera, manteniendo las características propias del aluminio.
